Los encabezas de “Buenas noticias”
Después de que Jesús murió y resucitó, sus apóstoles y seguidores comenzaron el trabajo de predicar el mensaje del Evangelio por todo el mundo. Algunos de los hitos más significantes de ese trabajo están grabados en un libro de la Biblia llamado “Los Hechos de los Apóstoles” (o simplemente “Hechos” para abreviar). Describe el rápido crecimiento del Cristianismo mientras se extendía como fuego a lo largo de todo el imperio Romano hace unos dos mil años.
Las enseñanzas de los apóstoles
Una de las cosas interesantes sobre los Hechos es que contiene varios resúmenes de las buenas noticias que los apóstoles enseñaron originalmente – el mismo corazón sobre lo que trata el Evangelio. Estos resúmenes son muy útiles para asegurarnos que vamos por el camino correcto de entender el mensajee verdadero de esperanza de la Biblia. Desafortunadamente, en tiempo posteriores una cantidad de ideas y filosofías paganas entraron en la Iglesia y se mezclaron con la verdad original, pero al regresar a Hechos y otros lugares en el Nuevo Testamento podemos determinar la esencia del Evangelio en la que creyeron Jesús y los apóstoles.
Aquí, entonces, hay algunos de esos resúmenes de ese mensaje del Evangelio:
“Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el Evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres”
(Hechos 8:12)
“Y habiéndoles señalado un día, vinieron a el muchos a la posada, a los cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas.
(Hechos 28:23)
“Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a el venían, predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.”
(Hechos 28:30-31)
Probablemente detectaste el patrón. En cada uno de estos pasajes hay dos elementos clave:
- Las cosas concernientes al reino de Dios;
- El nombre de Jesucristo.
Estos dos aspectos – el reino de Dios y Jesucristo – proveen un tipo de resumen taquigráfico de la respuesta de Dios hacia los problemas humanos; son, en esencia, de lo que trata el mensaje de la Biblia.
Las enseñanzas de Jesús
Podemos corroborar esta evidencia del libro de Hechos y confirmar que estamos en el camino correcto al enfocarnos en estos dos aspectos al ver algunos eventos en la propia vida de Jesús. En la narrativa de Navidad el ángel Gabriel se le aparece a María para anunciarle que tendrá un hijo. Es fascinante notar que Gabriel habla exactamente de los mismos dos temas que acabamos de encontrar en Hechos:
“Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo y llamarás su nombre Jesús. Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.”
(Lucas 1:30-33)
Notemos que el ángel habla sobre:
- El nombre y la identidad de Jesús (el nombre de Jesucristo).
- Su rol futuro como rey del reino eterno de Dios (las cosas concernientes al reino de Dios).
Estamos encontrando un hilo interesante aquí. Si continuáramos a través del Evangelio para ver las enseñanzas de Jesús encontraremos que una gran parte de lo que Jesús dijo se podría clasificar bajo esos dos temas: el mismo (como salvador y único mensajero de Dios), y el reino.7 Aquí hay algunos ejemplos de cada uno:
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mi.”
(Juan 14:6)
“Yo soy la puerta; el que por mi entrare, será salvo…”
(Juan 10:9)
“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”
(Juan 8:12)
Enseñanzas de Jesús sobre el reino:
“Después de que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el Evangelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el Evangelio”
(Marcos 1:14,15)
“a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablando acerca del reino de Dios”
(Hechos 1:3)
Dos problemas, dos soluciones
La evidencia es bastante convincente: el mensaje del Evangelio en el Nuevo Testamento se enfoca en el reino de Dios y en el nombre y trabajo del Señor Jesucristo. Bastante claro, entender estos dos componentes es absolutamente fundamental para entender propiamente un poco de las enseñanzas de la Biblia. ¿Pero por qué estos dos aspectos en particular?