No todos los detalles del contenido de esta carta a Filemón están claros. Un esclavo llamado Onésimo había agraviado a su amo, Filemón, un creyente que vivía en Colosas (ver.1-2; Colosenses 4:9, 17). Parece que Onésimo lo había ofendido. Sobre la base del v.18, podemos conjeturar que había robado dinero de su amo y después había huido. Es posible, sin embargo, que las palabras “si en algo te hizo daño o te debe…” simplemente indiquen que Onésimo había sido enviado a cumplir alguna comisión y se había demorado en su encargo.
En el mundo romano, durante la vida de Pablo, los esclavos a veces se escapaban e intentaban desaparecer en la subcultura marginal de las grandes ciudades. Por eso preguntamos qué motivo tenía Onésimo para huir específicamente a Roma. Habían otras ciudades grandes como Efeso, Esmirna y Pergamo. Tampoco sabemos cómo llegó a estar en la compañía de Pablo. Según Barclay (1995, pág.307) “Había en el Imperio Romano 60,000,000 de esclavos, y siempre existía el peligro de que se revelaran. Sus levantamientos se eliminaban pronto. Y si un esclavo huía, lo mejor que le podía pasar era que le marcaron con hierro candente en la frente con una F – que representaba la palabra latina fugitivus, y lo peor que le podía suceder era que le crucificaron.”
Nos parece que se convirtió a Cristo bajo la influencia y ministerio del apóstol Pablo. Habiendo resuelto Pablo que lo más oportuno sería el retorno de Onésimo junto a su amo legal, exhorta a Filemón a recibirlo de nuevo en su casa, y “no ya como esclavo, sino… como hermano amado”.
Esquema del contenido de la carta a Filemón:
Ver. 1 – 3 La salutación de Pablo a Filemón y a la iglesia en su casa.
Ver. 4 – 7 Pablo hace referencia a la fe, el amor, y la caridad cristiana de Filemón.
Ver. 8 – 14 Pablo suplicó perdón por su servidor Onésimo.
Ver. 15 – 17 Pablo impulsó los motivos para que Filemón lo perdone.
Ver. 18 – 19 Pablo prometió reparar todo el mal que Onésimo había hecho a Filemón.
Ver. 20 – 21 Pablo expresó su confianza en que Filemón se conformaría con su petición.
Ver. 22 Pablo mandó a Filemón a prepararle hospedaje.
Ver. 23 –25 Las salutaciones y las bendiciones finales.
Este ensayo pequeño de la carta de Pablo a Filemón nos presenta con una oportunidad de reflexión sobre nuestra vida en Cristo. En la introducción de su libro Adams escribió: “…Dios nunca pide que hagamos algo sin antes darnos instrucciones específicas y un modelo para seguir. En el caso de la amistad, Dios nos ha dado ambas cosas. La Biblia está llena de exhortaciones, instrucciones y ejemplos de amistad. La epístola a Filemón nos brinda un patrón maravilloso de amistad bíblica, tal como Dios la ha concebido.” (2002, Pág.13). Recordamos las enseñanzas de Jesús en Juan 13:35. El amor caracteriza a la comunidad de los creyentes. Por eso, el amor mutuo de los discípulos manifestará a todos su pertenencia a Cristo.
“Te ruego por amor”
Lo que se impone primeramente es la brevedad de la espístola. No es más larga que muchas de las cartas que se suelen escribir hoy en día. Sin embargo, contiene gran riqueza espíritual.
Sabemos del saludo de v.1 que Pablo está preso, seguramente por última vez en Roma. Es significativo que se llama aquí ‘prisionero’ y no ‘apóstol’ como a principio de muchas de sus cartas. Como veremos vuelve a hacer referencia a su estado de ‘prisionero de Jesucristo’.
Podemos sentir el gran amor (Digresión 1) de Pablo hacia Filemón y la ‘iglesia que está en tu casa’. No cabe duda que esta iglesia es la de Colosas, pues las mismas personas fueron enviadas con las dos cartas. También se hace referencia a Arquipo en Colosenses 4:17. Pero la razón más importante es la semejanza entre Filemón 4-7 y Colosenses 1:3-8. El amor y la fe de la iglesia en Colosas se reflejan en el amor y la fe de un miembro de esta iglesia. Muestra el valor del compañerismo verdadero del cuerpo de Cristo que puede hacer una unidad indivisa de muchos individuos distintos.
Por esta razón (vs.8-9), Pablo puede rogar con amor. Como hermano y preso de Cristo, y no tiene necesidad de afirmar su autoridad de apóstol y mandar a Filemón. Pablo ruega a favor de un esclavo fugitivo – uno que merece la muerte según la ley romana (Digresión 2). Pero Pablo muestra claramente la superioridad de la ley de cristo a las leyes humanas. Muestra también su confianza en Filemón como cristiano, en que envió al mismo esclavo Onésimo, en compañía de Tíquico, para entregar la carta a los colosenses y aún a su propio amo.
El poder de la transformación en Cristo Jesús se muestra claramente en la vida de Onésimo, Pablo le llama “mi hijo” (v.10) y “como a mi mismo” (v.12). Le asegura a Filemón del gran cambio en la vida de Onésimo (v.11) “el cual en otro tiempo te fue inútil, pero ahora a ti y a mí nos es útil”.
En esta breve carta se ve el amor y la sensibilidad de Pablo (v.14) y muestra que las divisiones sociales no tienen sentido en Cristo. Por eso Onésimo debe ser para Filemón “algo mejor que un esclavo…un hermano querido”.
Expone este principio muy claramente en Colosenses 3:10-11. Es significante que incluye esclavo y libre en la lista de las ‘diferencias’ que no existen en Cristo.
Con gran delicadeza recuerda a Filemón que él mismo tiene deudas, “tú mismo te me debes también.” (v.19), y por eso debe de mostrar misericordia con Onésimo. También menciona los deberes de los esclavos y de los amos en su epístola a los Colosenses, y hace recordar a los amos, incluso a Filemón que también “vosotros tenéis un Amo en los cielos.” (Colosenses 4:1).
Concluye en expresar su confianza en Filemón, “sabiendo que harás aun más de lo que te digo”. (v.21). Esperó que le sería posible visitar a Filemón y los hermanos colosenses, pero sabemos que murió como “prisionero de Jesucristo” en la segura esperanza de la resurrección.