Adjuntamos unas respuestas de los hermanos con respecto a la pregunta en “Explorando la Biblia”:
“K” – ¿Cuál es la lección de esta carta para nosotros HOY?
- Amar a nuestros hermanos y hermanas (1 Juan 3:11-12)
- Hay un solo amor en el cristianismo – La iglesia como esposa de Cristo siendo él la cabeza.
- No codiciar el servidor de otro hombre. No tenemos servidores sino podemos codiciar muchas otras cosas materiales. Deberíamos solo codiciar las cosas espirituales.
- ¿Por qué hacemos las cosas que hacemos? ¿Es porque esperamos ganar cosas materiales o una ventaja sobre otros? ¿O es por amor (v.9), el amor a Jesús y nuestros hermanos y amigos? La carta a Filemón nos muestra que es el mejor motivo. (1 Pedro 1:22)
- El amor que Pablo tenía por el hermano Onésimo también nos sirve a nosotros hoy, tener un solo amor los unos para los otros y especialmente para con los débiles en la fe.
- La disparidad social no es un criterio para valorar la importancia de una persona en conexión del cuerpo de Cristo, y su conveniencia para ser incorporado en eso. Es una verdad, que tanto Filemón el señor como Onésimo el esclavo, habrían hallado difícil apreciar aparte de la ruptura temporánea de esa conexión. (vers. 15-16)
- La carta es una lección en delicadeza y tacto, y amor de una persona para otras, sean esclavos o sean amos.
- La lección es saber perdonar y comprender las faltas de otros porque si nosotros perdonamos a otros, ellos y más que nadie Dios nos perdonarán nuestras faltas. Así podemos leer en la Oración del Señor porque Pablo le pedía a Filemón que perdonara a Onésimo y que lo recibiera como un hermano (v.16). Al tener contacto con el evangelio, la vida de Onésimo llegó a tener valor para Pablo, Filemón y más que nadie el Creador (vs.10-11).
- Para mi esta carta es como una parábola, mostrándonos que tenemos que perdonar a los que hacen mal contra nosotros porque Dios nos perdona. Nuestra deuda con el Padre es mucho más grande que el uno al otro. (Mateo 18:23; Colosenses 3:12-14)
- En la epístola a Filemón, podemos ver como la vida en Cristo causa grandes cambios en la actitud de los hombres. En Cristo todos somos iguales. (Gálatas 3:28)
- Podemos pensar en la fe de Pablo y la confianza en Jesús. Nos está dando una buena lección de fidelidad.
- Para seguir a Jesús, debemos orar con fe y amor. Somos prisioneros en el evangelio. Debemos tener valentía y firmeza en el evangelio. Si llegamos tener penalidades y sufrimientos, debemos recibirlos con amor y fe dando gracias a nuestro Padre y el Señor Jesucristo. Todos somos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio. Así hablamos no como para agradar a los hombres, sino a Dios que prueba nuestros corazones. (1 Tesalonicenses 2:13-16).
- Pablo exhorta a los siervos a servir y obedecer a sus amos y a estos tratar con caridad a sus siervos.
- El apóstol da gracias a Dios por la fe y la caridad de Filemón. Desea que la comunicación de esa fe les dé ánimo a otros hermanos.
- Cuando entramos en la familia de Cristo por medio de la fe y el bautismo, nuestras vidas están llenas del amor de Dios. Debemos tratar a otros con ese mismo amor.
- Onésimo tuvo que resolver su problema con Filemón. Igualmente tenemos que resolver nuestros problemas. Jesús dará la fuerza. Pero nosotros tenemos que tomar el primer paso y afrontar nuestros problemas y no tratar de huir de ellos.